Ya han pasado las navidades y reyes. Estas fechas son señaladas para todos, de una forma u otra, y en el mundo de las consolas, evidentemente, también lo son.
Estas fechas deben centrarse sobre todo en el público infantil y juvenil, ya que son ellos los que les pedirán regalos a sus progenitores. Pero también hay tener en cuenta que serán éstos quienes los pagarán, por lo que deben hacerse atractivos para intentar que tanto el desconocimiento como el precio no les echen hacia atrás a la hora de comprar. Para esto, la mejor combinación de producto-precio es, sin duda, la creación de packs promocionales.
Nintendo tiene experiencia en ello desde hace años. Desde la comercialización del pack de Game Boy Color de Pikachu, que se vendía con la consola customizada especialmente con imágenes de Pikachu y Pichu junto la edición de Pokémon Amarillo, Nintendo ha ido creando packs de este estilo de los títulos en los que más esperanzas de venta ponía.
Actualmente, sus esfuerzos se concentran en las consolas Wii, WiiU y Nintendo 3DS XL, y va a ser de ésta última de las que vamos a hablar.
Estas navidades hemos podido ver varios packs promocionales de la consola Nintendo 3DS XL, acompañados por uno o varios juegos, con la consola customizada o sin customizar, de precios variables. Todo depende todo del pack que se elija.
El primer personaje que se ha hecho no sólo con un pack propio sino con dos, es Mario Bros. ¿Quién si no? Pudimos elegir entre conseguir Mario kart 7 o Mario 3DLand, siendo el juego el complemento de una videoconsola Nintendo 3DS XL en color blanco.
El siguiente esperadísimo pack es el de Nintendo 3DS XL Amarillo Pikachu, que es el que nos trae la consola en edición limitada y de coleccionista personalizada con el Pokémon más famoso. El precio del pack de Mario varía entre los 220 y 240 euros, dependiendo del establecimiento. Por su parte, el pack de Pikachu ronda los 200 euros.
Con esta presentación y estos precios, ¿quién puede resistirse? Tanto los consumidores como los que tienen que pagarla no tienen excusa para no prestar atención a estas grandes oportunidades.